miércoles, 18 de diciembre de 2013

Hazte extranjero, que nosotros ya lo somos.


Parece que se va a imponer como tradición. Parece que los de Campofrío han cogido carrerilla (como si de Freixenet o de los turrones se tratara) y nos van a deleitar con un nuevo anuncio navideño cada vez que se anuncien estas fechas. Os pongo por aquí el anuncio, para el que no lo haya visto.

El año pasado escribía en este blog para poner el grito en el cielo por la manipulación sensiblera y con total desprecio por las situaciones de pobreza y precariedad que hacía Campofrío en su anuncio, (http://loquedurauncigarro.blogspot.com.es/2012/12/campofrio-y-el-fin-del-mundo.html) y este año, por no perder la tradición, voy a hacer lo mismo.

En esta ocasión, los ingeniosos publicistas del anuncio de Campofrío (la agencia publicitaria McCann) vuelven a jugar con el sentimiento de orgullo de lo español, tirando de tópicos localistas como lo de hablar a voces, el contacto físico, el sentido del humor, invitar aunque no tengas un duro... cosas que, por supuestísimo, son las que más valor tienen en España, las que nos van a sacar de la crisis.

Qué más da que nos recorten, que tengamos la generación mejor preparada y más desempleada, que estén dando más recursos a grandes empresas y a bancos que a familias y pequeños empresarios. Qué más da todo eso. Cuando ninguno tengamos techo ni derechos, saldremos a la calle principal del pueblo, cada uno con su paquetito de lonchas de Campofrío (a cuatro euros el paquete, eso sí) y se nos olvidarán todos los males.

Mientras tanto los políticos, banqueros y grandes empresarios podrán seguir tranquilos con su juego del Monopoly viviente, porque a nosotros nos da igual que nos suban la luz, que nos deshaucien, que nos obliguen a emigrar con dos carreras y un máster, que aprueben leyes cada semana sin el consentimiento de la población...a nosotros nos basta con echarnos unas risas en el bar, ¿verdad?

Pero no acaba aquí mi indignación. Una vez más, la incoherencia y la hipocresía de la publicidad de estos tipos acaba saliendo a la luz por alguna parte. Buscando un poco por la web, he encontrado que (ojo al dato) la empresa Campofrío Food Group pertenece, en un 45% a Sigma, una empresa mexicana; y en un 37% a Shuanghui International Holdings, ¿empresa de Albacete, no? No, de China.

¿Pero no éramos muy españoles y nos encantaba nuestra forma de ser, nuestro carácter, nuestras costumbres...? Parece que sí, que a la hora de tomarse unas cañas y contar unos chistes, somos los números uno. Pero que no nos saquen de ahí, ¿no? ¿Para qué vamos a preocuparnos del paro, de las ayudas a la banca, de los recortes en investigación, en sanidad, en educación...?

Pues qué queréis que os diga. Señores de Campofrío, por mí se podrían hacer ustedes mexicanos, o chinos, porque yo ya sé lo graciosos que somos los españoles, lo que nos gusta pegar voces y lo que nos abrazamos y nos tocamos...lo que quiero es que nos den la oportunidad de demostrar lo que valemos de verdad. En ciencia, en educación, en desarrollo, en innovación, en empresas, en la Universidad, en la industria... en todas esas cosas para las que de verdad estamos preparados, y que realmente hacen falta para sacarnos de la crisis.

El anuncio acaba con el ya conocido eslógan: "Que nada ni nadie nos quite nuestra manera de disfrutar de la vida." Pues eso, que nada ni nadie nos diga hacia dónde hay que mirar mientras se comen nuestro pan.